En los años 90 la actriz de 50 años se popularizó y consiguió papeles importantes en películas
La polémica de los premios Oscar protagonizada por Will Smith y Chris Rock puso en el ojo de la opinión pública a la familia del actor de “Hombres de Negros”, entre ellos a su esposa Jada Pinkett Smith.
Una broma sobre la alopecia de la actriz fue suficiente para que el intérprete detonara y subiera al escenario a cachetear al comediante, quien al igual que todos los presentes quedó sorprendido y en shock.
Esta no es la primera dificultad que la actriz afronta en su vida. En el pasado se enfrentó a algunas adicciones que pudieron acabar con su carrera.
Así fue su lucha contra sus adicciones al alcohol y al sexo
Su crianza no fue sencilla. Además de la violencia que su padre ejercía en su madre, fue criada en el barrio de Baltimore donde nació, llamado Park Heights.
“Cuando pienso en quién era y cuáles eran mis ideas de supervivencia, y el tipo de actividades en las que estaba involucrada a los 13 años (…) Iba a ir a la cárcel o iba a ver una tumba. Esas eran mis dos opciones, porque te quedas atrapada en una mentalidad”, comentó a American Way, reseñó el Huffington Post.
Jada Pinkett Smith comenzó su carrera en los años noventa. En 1991 le llegó su gran oportunidad en la serie “A Different World”, proyecto que la dio a conocer y “fue el primer papel que tuve que me proporcionó la exposición que me llevó a protagonizar películas”, dijo a Entertainment Weekly.
Luego vinieron éxitos tras éxitos en la misma década y en los dos mil. “Menace II Society”, “The Nutty Professor”, “Return To Paradise”, “Ali”, “The Matrix Reloaded”, “The Matrix Revolutions”, “Collateral”, “The Women”, “Magic Mike XXL”, “Bad Moms”, “Gotham”, entre otros.
Desde entonces, Pinkett habló abiertamente en diferentes ocasiones de las dificultades que atravesó durante su estrellato. “Yo también era una borracha violenta, por eso tuve que dejar de beber”, dijo en el programa que comparte con su madre e hija, “Red Table Talk”, mientras recordaban la violencia machista que vivió con sus padres.
La esposa de Will Smith relató que se dio cuenta que tenía un problema con el consumo de alcohol. “Recuerdo haber tocado fondo una vez que estaba sola en casa y tomé dos botellas de vino e iba a por una tercera”, recordó. “Y fue como: ‘Espera. ¿Estás en esta casa sola yendo a por tu tercera botella de vino? Puede que tengas un problema”.
Más tarde en el programa mencionó que “cuando era más joven, definitivamente creo que tenía algún tipo de adicción al sexo, sí, que todo podía arreglarse con el sexo”, se sinceró la actriz. “Luego me convertí en una adicta al gimnasio”.
Sobre la alopecia: “fue aterrador cuando empezó”
En el año 2018, la actriz de 50 años dio a conocer en su cuenta de Instagram que le habían diagnosticado alopecia. Según Jada, es una condición “altamente estigmatizada en mujeres”, por lo que reunió mucho valor antes de anunciarlo y quitarse el turbante que utilizaba para ocultarlo.
“He estado recibiendo muchas preguntas sobre por qué he estado llevando este turbante. Bueno, he estado teniendo problemas con pérdida de cabello”, reveló entonces Pinkett en su programa.
“Fue aterrador cuando empezó. Estaba en la ducha un día y tenía la mano llena de pelo y fue como ‘Oh, Dios mío, ¿me estoy quedando calva?”, recordó. “Willow (su hija) me hizo hacerlo (raparme) porque era hora de dejarlo ir”, escribió en la publicación.
«Nunca quise casarme con él»
Recuerda que contrajo matrimonio con el actor por obligación de su madre al estar embarazada.
Desde que Will Smith, fuera vetado durante 10 años en cualquier evento de la Academia del cine de Hollywood por dar un bofetón al comediante Chris Rock durante la gala de los Óscar. Se ha especulado mucho sobre su relación con Jada Pinkett Smith, su mujer y la víctima de una broma de mal gusto por parte del cómico.
Hoy la actriz hace noticia con una dura revelación sobre su matrimonio con Smith. Jada, durante su programa ‘Red Table Talk’, afirmó que nunca quiso casarse con el actor, quien se encuentra en un centro de rehabilitación de lujo para controlar sus problemas de ira.
«Estaba bajo tanta presión, ya sabes, siendo una actriz joven, siendo joven, y estaba como embarazada y no sabía qué hacer», declaró Pinkett Smith, de 50 años, en un fragmento extraído de aquella entrevista en 2018.
Jada gregó que su madre la obligó a casarse con Smith después de quedar embarazada de su primer hijo juntos, Jaden, ahora de 23 años.
«Estaba tan molesta porque tenía que casarme. Estaba tan enojada que fui llorando por el maldito pasillo. Lloré todo el camino por el pasillo», puntualizó.