Tal vez todos los memes de gatos en cajas esconden cierta verdad: los felinos domésticos aman sentirse cómodos en las superficies de cartón. Ésta es la razón
Es el colmo. Te gastaste un dineral en los juguetes nuevos de tus gatos, y lo único que quieren es jugar con la caja de cartón en la que venían empacados. Lo mismo pasa con los paquetes que pides a domicilio: antes que los abras tú, ya tiene marcas de mordidas y rasguños por todos lados. Aunque puede ser molesto —y admitámoslo, es muy tierno también—, hay una razón científica detrás de este comportamiento.
De acuerdo con Gabriela Smith, especialista en cognición animal comparativa en la Universidad de Medicina Veterinaria de Viena, el hecho de que a los gatos les gusten las cajas de cartón tiene que ver con su instinto animal. Aquí te explicamos por qué.
¿Por qué los gatos aman las cajas de cartón?

Aunque dé coraje, es mucho más probable que los gatos jueguen con cajas de cartón que con los accesorios caros que a veces les compramos. Según Smith, los felinos domésticos se acercan más a los empaques que a los juguetes por una cuestión evolutiva. Especialmente, para defenderse del estrés de la vida cotidiana:
“Lo que sabemos es que es una forma de consuelo”, explicó Smith a Live Science. “Esto tiene sentido desde un punto de vista evolutivo. La presión lateral es reconfortante”.
Un estudio realizado en los Países Bajos descubrió que, en los refugios de animales, los gatos se sentían ‘más protegidos’ al esconderse en cajas de cartón. Los investigadores se dieron cuenta que, cuando los felinos se sentían amenazados, podían relajarse más al sentirse seguros en una caja.
Cuando no tenían donde esconderse para recuperar la paz, sencillamente volteaban sus cajas de arena para recuperar la serenidad. Sin embargo, Smith está segura de que este comportamiento va más allá de las cajas de cartón. Según su experiencia científica, los gatos domésticos ocupan casi cualquier espacio cerrado como refugio.
Cazadores innatos

Otra de las posibilidades que la científica sugiere es que, como los gatos son cazadores innatos, escogen las cajas para ‘esconderse de sus presas‘. Aunque todavía esta teoría no se comprueba en un laboratorio, Smith considera que es una explicación natural a este comportamiento.
Así como lo harían en la naturaleza, los gatos domésticos buscan espacios estratégicos para atacar pájaros, mariposas e insectos. A veces, también, a sus familiares humanos o a otros compañeros gatunos. “Mi gato lo hace si estamos jugando: se esconde detrás de algo para poder saltar”, explica la experta.
Sin embargo, zoológicos alrededor del mundo han registrado el comportamiento en tigres, leones, panteras y otros felinos mayores. Así que la obsesión por las cajas no es exclusiva de gatos domésticos, sino básicamente, de cualquier felino en cautiverio.